No deben calumniar a nadie y tienen que evitar pleitos. En cambio, deben ser amables y mostrar verdadera humildad en el trato con todos. (Tito 3:2)
Creo que hay dos cosas en las que podemos estar de acuerdo como padres solteros. El compañerismo de mamá y papá en la crianza de un hijo es un aspecto necesario y crucial en el crecimiento de un niño, estén casados o no. También podemos estar de acuerdo en que no siempre es tan fácil; de hecho puede ser totalmente frustrante algunas veces. Sin importar la situación, como padres cristianos estamos siempre llamados a que por nuestro lado manejemos la situación en la manera que honra a Dios; el resto debemos confiárselo a Él.
También pienso que algunas veces debido al dolor y heridas que un divorcio o una relación rota causan, dejamos que nuestras emociones tomen control de nosotros y anule nuestro mejor juicio. Hay muchas veces en las que uno de los padres retiene o oculta al niño de su otro padre por un resentimiento, o en un acto de venganza el niño es usado como una pieza para vengarse del otro adulto. De hecho, los padres pueden actuar mucho mas infantiles que los niños en situaciones como esta, y adivinen ¿quien sale mas herido? Los niños. De hecho, así como yo, también te encuentras en una situación de paternidad compartida, asi que voy a compartirles dos opciones muy diferentes que podemos escoger cuando se trata del otro padre: podemos ser un defensor para ellos...o un adversario.
Para las mamás:
Ladies, voy a esforzarme por ser lo mas sensible posible aquí. Estadísticamente, la mayoría de ustedes serán el custodio primario, y algunas de ustedes probablemente no tendrán otra opción cuando papá no aparece en la foto. Hay demasiados casos donde papás están siendo restringidos de sus hijos porque mamá no está dejando que él los vea. Él podría incluso ser un gran padre, y tu amargura te esta causando ceguera. Déjame darte un par de ejemplos de cómo el mantener al padre de tu hijo fuera de su vida solo hiere al niño, incluso más de lo que tu crees que estas hiriendo al papá:
- Estadísticas muestran que niños que crecieron sin la presencia de papá en sus vidas, experimentan un gran porcentaje de comportamientos perjudiciales y destructivos. Probablemente piensas que puedes hacer un buen trabajo por ti misma, y eso puede ser cierto. Pero el punto es que si papá está dispuesto a ser parte de la vida de su hijo, hay un menor riesgo de que el niño caiga en trampas como la bebida y drogas, embarazos no deseados, y otros potenciales patrones perjudiciales. Si tratas de hacerlo sola, sin importar cuanto te esfuerces, puede ser muy probable que tu hijo tome decisiones destructivas en su vida.
- Cuando papá está involucrado en la vida del niño, el niño experimenta un gran aumento en su auto percepción, desarrollo academico, y un gran sentido de bienestar. El no permitirle a papá ser parte de la vida del niño es también quitarle una gran parte de su personalidad. Cuando podemos poner a un lado el pecado del enojo y la amargura, todos salen beneficiados a largo plazo. Especialmente el niño.
En lugar de esto, madres, busquen al Señor en la oración, a través de su Palabra, y su consejo piadoso para ayudarte a pelear lo que sea que te está impidiendo ser una defensora para tu ex cuando se trata de el como papá de tu hijo. ¿Es de verdad tan mal padre? ¿Es esa la opinión de Dios...o la tuya? Ten cuidado de que esto no obstaculice tu papel como madre piadosa. Satanas es especialmente mañoso cuando se trata de situaciones como esta, y un pequeña herida ahora puede tener implicaciones generacionales. Trata de mantenerte enfocada y permítele a Dios darte un corazón y espíritu renovado.
Para los papás:
Miren chicos, basado en los ejemplos de arriba, estoy extremadamente consiente de cuanto puede doler el ser mantenido a raya o restringido en la vida de su hijo. Yo he estado ahí, y en distintas maneras, todavía lo experimento hasta el día de hoy. Necesitamos mirar más allá de eso. Dios nos ha dado el cargo de ser los líderes espirituales de nuestros hijos. Sin importar que es lo que pasa del otro lado, aún esa persona sigue siendo la madre de tu hijo y ella merece conocer el amor de Cristo a través tuyo. Si no lo crees, entonces tomemos un vistazo a nuestras propias vidas. Ninguno de nosotros ni siquiera alcanzamos a medirnos por los estándares de Dios; pero, a través de su infinita misericordia y gracia, somos redimidos por nuestra esperanza y fe en Jesús.
Aquí hay otra trampa en la que muchos papás caen. Especialmente nosotros quienes no tenemos la custodia completa del niño. Y esto es cuando descuidamos nuestro papel como líderes y solamente tomamos el papel de el papá "bueno" o "divertido", eliminando cualquier oportunidad de ser un buen papá y dejando a mamá lidiando con la completa carga de la disciplina. Quienes no emplean la vara de disciplina odian a sus hijos. Los que en verdad aman a sus hijos se preocupan lo suficiente para disciplinarlos (Proverbios 13:24). Incluso le damos a los niños muchas cosas, pero nunca nosotros mismos; o tal vez invertimos en ellos con regalos y juguetes en vez de abogar con mamá en como tu hijo necesita estudiar mas y jugar menos. Lo que puede terminar pasando en un escenario como este es que ella termine siendo el padre "malo" mientras que tu recibes toda la gloria. Créanme, esto pasa. Algunas veces podemos acumular tanto resentimiento hacia la madre de nuestros hijos en los primeros años que nos podemos volver mas consumidos en peleas en contra de ella que en criar a nuestros hijos responsablemente. Y recuerda, nuestros hijos están siempre observándonos, y si no somos cuidadosos, incluso el mas sutil de los comentarios en contra de mamá pueden traer consecuencias a largo plazo.
Para los seguidores de Cristo:
Pablo nos da instrucciones específicas en los siguientes versos de Efesios 4: "... lleven una vida digna del llamado que han recibido de Dios, porque en verdad han sido llamados. Sean siempre humildes y amables. Sean pacientes unos con otros y tolérense las faltas por amor. Hagan todo lo posible por mantenerse unidos en el Espíritu y enlazados mediante la paz."
La Palabra de Dios es explícita cuando se trata de amar otros y especialmente cuando se refiere a padres criando a sus hijos. Las emociones pueden ser el campo de juego del Diablo si no son vigiladas, y es solo cuando una herida se deja sin tratamiento que puede infectarse. Para un padre soltero la crianza de un hijo no es perfecta porque es nacida de el quebrantamiento. A través de nuestra obediencia y fe en Cristo, deberíamos mirar más allá de lo natural y mantenernos concentrados en nuestro papel como padre o madre de nuestros hijos. Ser un defensor para tu ex no significa que necesitas ser su aficionado. Lo que esto demuestra es que incluso en las circunstancias más difíciles la luz siempre brillará sobre la oscuridad. Jesús tiene un inmenso amor por los niños (Mateo 19:14), entonces ¿por qué haríamos algo para obstaculizar una de las más grandiosas bendiciones que Dios nos ha concedido?
Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Compórtense de tal manera que todo el mundo vea que ustedes son personas honradas. Hagan todo lo posible por vivir en paz con todos. (Romanos 12:17-18)
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